El sarampión es una enfermedad infectocontagiosa por un virus que se transmite de persona a persona. Se contagia a través de las vías respiratorias por contacto con las secreciones nasales. Los primeros síntomas son: fiebre muy alta, tos, lagrimeos, irritación de ojos y manchas dentro de la boca.
No tiene tratamiento específico y se cura con descanso y medicamentos para bajar la fiebre. Suele aparecer en las estaciones de invierno y primavera. Se puede prevenir con la vacunación a los 15 meses y la revacunación a los 12 años.